Un pedacito de Castelldans en tu balcón
Cada botella de Oliferm aceite de oliva de Castelldans contiene la historia de tierras, manos y estaciones. Pero… ¿y si te dijéramos que puedes tener algo de esa magia en tu casa? Aprender cómo cuidar un olivo en casa es una forma preciosa de conectar con la tierra, de forma viva y cotidiana.
¿Qué olivo puedo tener en casa?
La variedad arbequina , la misma que utilizamos en Oliferm, es ideal para espacios pequeños. Tiene un crecimiento lento, hoja pequeña y resistente. Puedes tenerla en:
Maceta grande en el balcón
Jardín pequeño
Incluso en terraza soleada
Luz y orientación: clave para crecer
El olivo necesita mucha luz directa. Busca un lugar con mínimo 6 horas de sol al día . Si es posible, orientala hacia el sur. Recuerda que son árboles mediterráneos, aman el sol!
Riego, pero con medida
No es necesario regar demasiado. El olivo prefiere la sequía en exceso de agua . En verano, una o dos veces por semana es suficiente. En invierno, menos aún.
Consejo Olifermo: comprueba que el test tenga buen drenaje, así evitarás el encharque.
Sustrato y poda
Usa sustrato bien aireado y algo de arena o arcilla. Podala ligeramente en primavera para mantener su forma y estimular su crecimiento.
Una conexión con el ciclo del aceite
Cuidar un olivo en casa es mucho más que jardinería. Es aprender a observar las estaciones , comprender el ritmo lento y paciente de la naturaleza, y valorar aún más el aceite que nos llega cada año a la cooperativa.
Da vida a tu amor por el aceite
Tener un olivo en casa es una forma bonita de mantener viva la cultura de nuestro territorio. Y quién sabe… quizá algún día saldrá una aceituna que te recordará que cada fruto tiene su tiempo, pero también su valor.