Tradición, autenticidad y el papel clave del aceite de oliva
Cuando hablamos de cocina tradicional catalana, la salsa romesco es uno de sus grandes protagonistas. Esta salsa, con su sabor intenso y suave textura, acompaña a la perfección platos tan emblemáticos como los calçots , el pescado, la carne o las verduras a la brasa. Pero más allá de su sabor inconfundible, el romesco es una expresión de la tradición y de los productos de la tierra, especialmente de nuestro aceite de oliva virgen extra Oliferm .
Un origen humilde y arraigado en la tierra
La salsa romesco tiene sus orígenes en la zona del Camp de Tarragona, donde los pescadores la preparaban para acompañar al pescado a la brasa. Con el tiempo, la receta se expandió y se convirtió en un elemento imprescindible en muchos hogares catalanes. Su base de ingredientes incluye ñoras, almendras, avellanas, tomate escalivado, ajo, pan tostado, vinagre y, por supuesto, un buen aceite de oliva virgen extra.
El aceite de oliva, el ingrediente esencial
Para que una salsa romesco sea auténtica y tenga la textura perfecta, la calidad del aceite de oliva es fundamental. Un aceite virgen extra como el Oliferm , elaborado con aceitunas arbequinas y prensado en frío, aporta un sabor suave y afrutado que realza el conjunto de ingredientes y da una untuosidad inigualable a la salsa.
Los calçots y la tradición del fuego
Una de las combinaciones más icónicas de la salsa romesco es con los calçots , los cuales se cuecen directamente sobre las brasas. ¿Y qué mejor manera de hacerlo que con las ramas procedentes de la poda de los olivos ? Este recurso tradicional no sólo optimiza el aprovechamiento de los recursos naturales, sino que también aporta un aroma ahumado característico a la cocción de los calçots, haciendo que la calçotada sea una experiencia auténtica y sostenible.
Un homenaje a los sabores de la tierra
Disfrutar de una buena salsa romesco no sólo es degustar un plato, sino conectar con la historia y los productos del territorio. El romesco representa la cocina de siempre, la que aprovecha cada ingrediente con sabiduría y equilibrio. Y si lo preparamos con un aceite de oliva virgen extra Oliferm , el resultado es una salsa llena de autenticidad y tradición.
Esta temporada, cuando enciendas el fuego con las ramas de olivo y prepares tu calçotada, recuerda que el alma del romesco está en sus ingredientes y en la pasión con la que se prepara. ¡Buen provecho!